Retirada

Bostezar,
esa es la señal,
ya llegó el final.
Que se duerma lo despierto

y suelte lo real.

Y soñar...
Y soñar fuego derretido

y un glaciar quemándose.
Poblar desiertos
con sus lluvias infinitas.

Atardecer,
desaparecer.
La noche navega el cielo
y su sombra crece a tus pies.

La liebre ya está esperando,
se encoge la eternidad.
El tiempo abrió un atajo,
un vacío al que caer.

En el borde de las fascinaciones,
donde lo imposible florece,
un espejo me devuelve tu imagen,
cuando un gato negro aparece.

Dónde está la lógica de los sueños,
cuando la censura hace huelga.
Alguien ríe a gritos frunciendo el ceño.
Algo en su mente se balancea.

Creés que te despertás,
jurás estar en lo cierto.
Cruzás paredes, pisás el techo.
Recién saliste y seguís adentro.

Durmiendo para alterar
la quietud de este mundo muerto:
perder el mapa, romper el tiempo,
vivir la vida más como un sueño.

Somos este laberinto
con mil puntos de partida,
acertijo, callejón,
encrucijadas temidas.

Deambular la confusión
sin pretender la salida.

Lo inexplicable no tiene forma.
Lo que te espera, no lo esperás,
y te da otra oportunidad...

... de intentar desarmar tanto binario,
viejas formas que invalidan lo contrario.
Algo habrá que transitar de nuevo:
somos todo y nada, junto y a la vez.

En el centro de este caos,

una guerra se libró.

Salió herido el vigilante

que custodia la razón.

Ya se está cayendo el polvo

de esta antigua construcción.

Van cediendo sus pilares,

su mandato se agrietó.

Cada vida es un cosmos propio a la deriva
y busca su lugar en la inmensidad...

Nos fuimos de mambo

y la oscuridad nos acobardó.
No saber qué hacer

con la ambigüedad nos paralizó.

Ya no es tan simple entender cómo pensar
sin tener modelos a los que apuntar.

Para criticar lo binario que
nos trajo hasta acá,
tenemos un máster

en la prisión de la humanidad.

Y para crear algo menos gris,
nos faltó inventar

la palabra justa

para decir:

Quiero geder
al binarismo y su forma de ser.
Si sos amigo de la gorra, sos botón.
¡Che, binarismo, vos vas a correr!

Ya me cansé,
mundo binario, hoy vas a enloquecer.
Voy a cortar con tu hechizo y tu atracción
que tiene al mundo entre la espada y la pared.

Hoy canta La Nota y al bajar,
para ganarle al ballotage,
quiere perderse al encontrarte en el final.

Busca su refugio en el calor
y entre las voces del montón
se va sonando esta canción.

Bajo el escenario nacerá
la brujería popular,
y en una hoguera los mandatos arderán.

Sobre las cenizas bailarán
quemando el bien, quemando el mal,
en un ritual de carnaval.

¡Este es el principio del final!